Recordaba tres años muy felices,con detalles,regalos,risas,sonrisas,gestos de cariño.......
Se fueron a vivir juntos y un día Pedro,su marido,le pidió si podía dejar de usar esos escotes que llevaba y esas minifaldas porque había visto como el vecino del 3º le veía todos los días cuando salía del portal y ¡no paraba de mirarla! y Ana accedió.
Empezó usando leggins y camissetas de cuello redondo y terminó por ponerse camisetas y pantalones flojos unas tres tallas más grandes que la suya.Un día al volver de la compra,Ana se había olvidado de comprar la fruta para llevar su marido al trabajo.Pedro estaba en la cocina preparándo un bocadillo,cuando ana dijo ¡hala, me he olvidado las manzanas que me pediste!.Se giró,su mirada,sus ojos mostraban ira.La empujó y cuando estaba contra la pared,Pedro con el cuchillo alzado le gritó:ESTA ES LA ULTIMA VEZ QUE NO HACES YO QUE YO TE DIGO.
¡Pero si siempre le había hecho caso!.Ahí estaba el problema,en el principio,pero cada uno afronta las cosas como su carácter le dicta,y ella había reaccionado así,accediendo a todo.Lloró toda la noche,cuanto más lo recordaba más lloraba.Amaneció sin haber dormido y con los ojos hinchados.
Cuando Pedro se despertó,ella se había ido.Se fué a casa de su buena amiga Sandra.Ella siempre había sido como una hermana....
El sabía que ella estaría allí y fué a buscarla.Lloró,suplicó,se arrodilló y ella le perdonó.¡NUNCA MÁS LO VOLVERÉ A HACER!¡NO VOLVERÁ A PASAR!........y pasó,muchas veces más hasta hoy.Y aún así se casó con él y tuvo a Daniel,siempre tras oportunidades y con pensamientos y la esperanza de que cambiaría.Y no cambió,Nunca cambió.
Había pensado en denunciarlo,pero tenía miedo.Había pensado en marcharse,pero tenía miedo.....
Sandra sabía su situación y aunque casi no se hablaban porque Pedro se lo había prohibido,le ofreció nuevamente su ayoda,como había hecho 2552 veces antes y esta vez Ana la aceptó.
De lunes a viernes se veían en la entrada y la salida del colegio.Un día,después de dejar a los niños fueron al ayuntamiento a cambiar el empadronamiento de ella y su hijo en su nueva dirección,la de Sandra.Hizo un nuevo dni con el nuevo domicilio.Allí dijo que lo había extraviado por si Pedro le veía el dni,en su cartera dejó el antiguo y en casa de Sandra el nuevo,con el dni de Daniel también con la dirección cambiada e hizo dos pasaportes.
Abrieron una cuenta bancaria en un nuevo banco(con dinero que Sandra le había prestado),en cada paso que daban siempre se aseguraban que quedase constancia la dirección de Sandra.Un Lunes a las 9 de la mañana fueron al colegio,dió de baja a Daniel por cambio de residencia y le pidió un certificado de matrícula.A las 10 de la mañana estaban cogiendo un avión rumbo a Gambia,país sin extradición a España.Llevaba contato de trabajo en una O.N.G donde trabajaría cuidandoa niños huérfanos.Podía tener a Daniel con ella en su trabajo,en la escuela que había allí,en todos los momentos de sus vidas.
Diez años después son felices.Ana después de divorciarse de su marido se casó con Martín,un pediatra de Medicos Sin Fronteras que había conicido en Gambia al llegar.Sandra iba todos los años a verla,pasaba en Gambia todos los veranos,con sus hijos y su marido.
Daniel tenía ya 15 años,era todo un chico,feliz,orgulloso de su madre y agradecido con la vida que le había dado,llena de pequeñas grandes cosas,de todo el amor y el cariño del mundo de los otros niños con los que había crecido,de los compañeros de trabajo de su madre,de Martín.....y sobre todo el de Ana,su madre.Todos eran su familia,tenía cientos de hermanos y muchos tíos y abuelos.Nunca quiso ver a su padre,no se arrepiente.La decisión de su madre había sido la mejor opción,de otra manera nunca hubiese podido ser tan feliz.No sabe como darle las gracias,cada vez que la abraza piensa y dice.......¡GRACIAS, MAMÁ!
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